Más allá de la señalética en los edificios, hace falta conciencia social para una verdadera inclusión de las personas con discapacidad, coincidieron los participantes de la mesa panel “Experiencias de vida en el ámbito laboral/educativo”.

En el marco de la conmemoración por el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, se llevó a cabo la Jornada Científico-Cultural “Empoderamiento de las personas con discapacidad”, en el auditorio Benito Juárez de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), donde se realizó dicha plática.

Ahí, la directora de la organización Cultura Sorda Yucatán, Georgina Canto Ramírez, señaló que, pese a que ha habido avances, las personas con discapacidad auditiva siguen siendo relegadas, ya que muchas veces se piensa que no se pueden comunicar.

“Hemos estado luchando para abrir puertas, pero nos dan largas, nos dicen que no se puede. Las autoridades a veces piensan que solo hay una persona sorda, pero no, hay decenas de personas que pasan por lo mismo, es importante la parte de que nos apoyen, que fomenten el lenguaje de señas, se han abierto pocas puertas, pero seguimos trabajando”, manifestó.

Resaltó la necesidad de continuar creando asociaciones y buscando fortalecer lazos que permitan el crecimiento de la enseñanza de lengua de señas mexicana y entender la cultura de las personas con discapacidad.

En ese sentido, el auxiliar en capacitación de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (Codhey), José Rodrigo Chan Cuá, enfatizó que aún falta mucho por hacer, sobre todo en la parte educativa.

“Si no hay educación, sobre todo este sector de personas con discapacidad, obviamente si no tienen educación, cómo le van a dar las cuestiones laborales, por ello se les deben proporcionar las herramientas necesarias para autonomía, desplazamiento, para realizar sus actividades”, mencionó.

Declaró que en materia laboral hace falta más sensibilización por parte del empresariado, que entiendan que somos capaces de desarrollarnos y realizar actividades; la inclusión, continuó, va más allá de rampas y señalética, la parte importante es crear conciencia social y que la ciudadanía no los juzgue o discrimine.

“Ojalá las personas entiendan que una situación de discapacidad, así como puede ser de nacimiento, también puede ser adquirida, de ahí la importancia de crear conciencia social; al final del día podríamos tener los edificios más accesibles, pero las barreras de actitud humana son las más peligrosas”, finalizó.

Al hacer uso de la palabra, el delegado sindical del programa “Kekén te incluye”, Rolando Ortiz Araujo, destacó que este sector de la población es capaz de involucrarse en el ámbito laboral; para él ha representado un reto, sin embargo, dijo, gracias al apoyo de su empresa y de sus compañeros ha tenido grandes avances, además de que ha podido apoyar a sus compañeros.